Ya habéis decidido el estilo del vestido, ahora lo más importante es adaptar ese estilo a la personalidad y la fisonomía de la niña porque cada niña es diferente y queremos que sea su vestido ideal.
Algunos de los detalles «técnicos» que tenemos que tener en cuenta cuando elijamos un vestido son:
- el largo del talle: más, menos corto o a media altura
- tipo de cuello: redondo, cuadrado, semibarco
- tipo de vuelo: fruncido, de tablas, en capa
- tipo de manga: media ala, corta, corta larga, francesa
- tipo de cancan
En cuanto a los tejidos, adornos y detalles que lleve el vestido es fundamental adaptarlos al estilo de cada niña; por ej. un vestido que lleva adornos en horizontal sienta de manera diferente que un vestido que lleva adornos en vertical.
Otro detalle es el color del vestido que elegimos: tonos cremas? o tonos blancos?. Aquí decidirá el tono que mejor le siente a cada niña. A veces nos empeñamos en que el vestido sea siempre blanco pero a algunas niñas muy altas los tonos cremas les sientan mucho mejor (el blanco les hace parecer muy novias).